sábado, 10 de marzo de 2018

Los profesores ¿Especialistas o generalistas?

Para que la organización y planificación de las escuelas deben tenerse en cuenta una gran cantidad de aspecto, de los cuales la mayoría de la sociedad no contempla, como por ejemplo, la disposición de los profesores y de los alumnos o los diferentes documentos requeridos por ley, como, el plan anual del centro. En este caso nos centraremos en la organización del profesorado y de los estudiantes, ya que este problema no es de índole menor y que más preocupa a los investigadores. De esta organización nacen una gran variedad de modalidades de organización, con sus respectivas ventajas e inconvenientes. Esto trae como consecuencia el debate entre los partidarios de los profesores especialistas o generalistas.

Se define como profesor generalista al docente que imparte algunas materias a lo largo de la jornada; también se encargan de la asignación de la duración de la actividad planteada, los trabajos individuales y colectivos o los tiempos en descanso. Este tipo de profesorado es típico de los centros de enseñanza secundaria obligatoria.
En cambio los profesores especialistas son los que se definen como los maestros que imparten tanto las materias en las que está especializado, como las que no. Esto deriva en que no tengan la suficiente preparación para enfrentarse a un número tan elevado de asignaturas. Este tipo de profesorado es típico de los colegios de educación primaria.


Una de las modalidades más antiguas y tradicionales, es el sistema de rotación de docentes, que consiste en que el maestro se asocia a un nivel determinado y cada año avanza, junto a sus alumnos, al curso siguiente, hasta llegar al último curso. Las ventajas que ofrece es que el docente conocerá todas las características personales del alumno; en cambio los inconvenientes que ofrece son el impedimento de que los alumnos reciban influencia de otros maestros y por parte del docente se le obliga a realizar anualmente una nueva programación sin profundizar en una determinada.

La segunda modalidad de la que hablaremos será la especialización por niveles, empleada como posible solución a lo anterior. Este consiste en establecer a un docente un nivel determinado donde debe permanecer durante un período de tiempo establecido. Los aspectos positivos que ofrece es que el docente se especializa en un curso determinado, pero podrá causar desmotivación y cansancio profesional.  
En lo referente al sistema de rotación limitada o especialización en ciclos, el cual no tiene vigencia en la actualidad ya que se han derogado los ciclos educativos en la etapa de educación primaria. Este consiste en que se le adjudica al profesor en los ciclos durante en tiempo que estos duran. Los docentes que siguen este tipo de modelo se especializan en el ciclo en el que se encuentran y permanencen con ellos los dos años que este perdura. En el caso de que al docente no se le ofrezca la posibilidad de cambiar de niveles educativos, tendrán lugar muchas consecuencias negativas para él, como caer en la conocida como "rutina profesional" y el aburrimiento del profesor que se puede contagiar a los alumnos.


Una solución que se esta empleando para frenar los problemas que acarrea la anterior es el sistema de rotación limitada alternativa, donde el profesor del centro que sigue este modelo sigue el siguiente esquema.

1º, 2º -> 5º, 6º -> 3º, 4º

Por último, hablaremos de la especialización del profesor por área cuya organización consiste en adscribir a los especialistas a las distintas materias, y éstos van rotando por todos los cursos disponibles para impartir la asignatura que le es propia. Es el modelo de la Educación Secundaria, el Bachillerato, parte de la Educación Primaria... Presenta ventajas como la cualificación y la motivación de todas las partes implicadas en el proceso de enseñanza; e inconvenientes como la dificultad de confección de horarios en cuanto al índice de fatiga intelectual.

En mi opinión, el modelo con mayor efectividad es el último de ellos, ya que promueve la motivación del docente a eleborar una planificación para los cursos venideros y poner en práctica una metodología muy diferente ya que no es lo mismo impartir clase en los cursos con los alumnos más benjamín que en los más avanzados. Además, a los alumnos le ayudará tener la referencia y la explicación de diversos profesores sin que se caiga en la rutina escolar.

Como se ha comentado al principio de este apartado, todos estos tipos desembocan en uno de los principales objetos de debate dentro del ámbito educativo, ¿generalistas o especialistas? Por ello me veo en la situación de lanzar la siguiente cuestión: ¿Los centros de educación primaria deben contar únicamente con generalistas, o también, deben incorporarse especialistas? En mi opinión los dos tipos de docentes deben de existir y tener protagonismo en el colegio para asegurarnos que se establece una cohesión con la comunidad educativa. También, resaltaría que en los cursos inferiores no debe de haber un número elevado de especialistas debido a que el aprendizaje en esas edades se caracteriza por ser generalizado, globalizado y totalizado.
Algunas personas especializadas en el campo suelen aportar la siguiente intervención: Generalistas, aprendices de todo, ¿maestros de nada?




Fuente: García, F. (2002). Organización escolar y gestión de centros educativos. [Archidona, Málaga]: Ediciones Aljibe.

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